Luis Días, padre de la música alternativa Dominicana.

Artículo de Chino Sing – Foto de Jaime Guerra

Conocí a Luis Días, o como muchos lo llaman cariñosamente, “El Terror”, a través de mi tío, quien era su amigo. Ellos vivieron juntos en una pensión mientras estudiaban en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD). Recuerdo vívidamente el día que conocí a Luis en El Conde.

Mi tío y él se saludaron con mucho cariño después de 20 años sin verse, lo que dejó una impresión profunda en mí sobre la calidad humana y la conexión genuina que Luis tenía con sus amigos.

Luis Días nació el 21 de junio de 1952 en Bonao, un pueblo en el corazón de la República Dominicana. Desde joven, mostró un talento innato para la música, lo que lo llevó a estudiar en la UASD. Fue durante su tiempo como estudiante que comenzó a experimentar con la fusión de ritmos tradicionales dominicanos como el merengue, la bachata y los palos, con géneros más modernos como el rock y el jazz.

Entre sus obras más destacadas se encuentran composiciones como “Marola” , “El Guardia del Arsenal” y “Liborio”, al igual que decenas de canciones populares que fueron interpretadas por . Su capacidad para tejer las raíces culturales de la música dominicana con elementos contemporáneos le permitió crear un sonido único y revolucionario.

 

su legado.

Inspiración para una Generación

La influencia de Luis en la música dominicana es incalculable. Su trabajo no solo redefinió el panorama musical del país, sino que también inspiró a una nueva generación de músicos y artistas a experimentar con sus propios sonidos.

Recuerdo claramente la primera vez que escuché a Luis tocar en vivo. Me quedé impresionado por su habilidad para mezclar lo tradicional con lo moderno, creando un sonido que era tanto familiar como nuevo. Este encuentro fue decisivo para mí y para mi banda, TKR. Luis nos enseñó a no tener miedo de ser auténticos en nuestra expresión artística. Su valentía y creatividad nos motivaron a seguir nuestro camino como creadores y artistas, lo que culminó en la grabación de nuestro álbum Inertia en 2005.

Nunca olvidaré el día que íbamos a empezar a grabar el disco. Luis estaba en el estudio y nos notó un poco preocupados o tímidos con el hecho de grabar. Nos dio el consejo más apropiado para el momento:

“Cuando yo grabé mi primera canción fue un trabajo del carajo, ahora ustedes lo tienen muy fácil. Graben todo lo que puedan, la música es un desahogo, nosotros no podemos vivir sin crear, no dejen de hacerlo porque es parte de su huella en esta vida.”

Temas Populares

Luis Días compuso una serie de canciones que se han convertido en clásicos de la música dominicana. Algunas de sus composiciones más populares incluyen:

  • “Marola”: Un tema que captura la esencia de la vida rural dominicana, lleno de imágenes vívidas y un ritmo contagioso.

  • “Liborio”: Una canción que rinde homenaje a la figura mítica de Liborio Mateo, líder espiritual y revolucionario.

  • “Baila en la Calle”: Popularizada por el cantante Fernando Villalona, esta canción se ha convertido en un himno del carnaval dominicano.

  • “El Guardia del arsenal”: una historia de servicio militar, narrada desde la óptica de un soldado dominicano y sus peripecias. 

  • “Ella me vivía”: una canción que narra una historia de amor en un barrio de R.D, de manera pintoresca. 

Estas canciones no solo demuestran la habilidad de Luis para crear melodías pegajosas y letras significativas, sino que también destacan su profundo conocimiento y respeto por la cultura y el folklore dominicano.

El papá de la música alternativa dominicana.

Luis “El Terror” Días dejó un legado que continúa inspirando a músicos y artistas en la República Dominicana y más allá. Su capacidad para fusionar lo tradicional con lo moderno abrió nuevos caminos para la música dominicana, y su influencia se siente en cada rincón del país.

Para mí, y para muchos otros, su valentía y creatividad siguen siendo una fuente de inspiración. Luis nos enseñó la importancia de nuestras raíces culturales y la libertad artística. Su música vive en cada nota que tocamos y en cada canción que cantamos, recordándonos siempre la grandeza de nuestra herencia y el poder de la autenticidad.

descubre.